EMBALSE DE ORELLANA

Es el más grande de cuantos hay en el tramo medio del río Guadiana. Le preceden otros dos: el de Puerto Peña y el de Cíjara, que con el cercano pantano de Zújar forman el territorio conocido como Los Lagos de Extremadura.

Esta gran masa de agua tiene diversos usos: el principal es el riego de miles de hectáreas de todas las Vegas Bajas de Extremadura, también para el abastecimiento de algunos pueblos, sobre todo en determinadas épocas del año. Hay una pequeña central hidroeléctrica que aprovecha por tercera vez el salto para producir energía.

Últimamente destaca el uso turístico y deportivo. Con la Bandera Azul se reconoce unos valores y una trayectoria.

La calidad de las aguas y de los servicios que aquí se prestan tiene suficiente entidad para ser reconocida entre los mejores lugares de baño de este país y la única en costa interior que merece tal galardón.

La presa se finalizó en 1963, después de muchos años de construcción. Desde el principio vino a modificar radicalmente el entorno, las comunicaciones y las actividades tradicionales de la población que vive en su entorno.

Con la presa, que es en sí misma un puente, se construyeron otros que aseguraban el paso continuo de personas y mercancías, algo que históricamente nunca había sucedido en esta parte de Extremadura, parece un contrasentido, pero nunca estuvieron tan lejos las orillas y nunca tan fácil pasar al otro lado.

Los ecosistemas de rivera se perdieron, y con ellos muchas huertas que eran un maná inagotable para las gentes. Los pueblos cedieron sus mejores tierras sin una contraprestación clara, cuando son el almacén de una inmensa riqueza que se genera kilómetros abajo.

Sólo la industria turística parece dejar réditos en la zona. La práctica de deportes acuáticos, especialmente la pesca, junto a la infraestructura de alojamientos, restaurantes, chiringuitos, empresas de actividades y servicios públicos hacen de este un destino turístico cada vez más consolidado.

Sus más de cinco mil hectáreas disfrutan de diversas figuras de protección medioambiental: incluido en la Red Natura 2000 con declaraciones como la Z.E.P.A. (Zona de Especial Protección de Aves), la Junta de Extremadura ya se fijó en el territorio incluyéndolo en la Zonas de Interés Regional. Pertenece, además, junto con los humedales más importantes de España (como las Tablas de Daimiel), al Convenio Ramsar.